24 de octubre de 2025

Dios de segundas oportunidades

 Buenos días :)

Título del devocional: La segunda vez

Pasaje bíblico clave: Jonás 3:1

Cuando la palabra de Dios llegó a Jonás por primera vez, se negó a obedecer y optó por huir a la tierra de su enemigo en lugar de ir a Nínive, como Dios le había ordenado. Intentó escapar de la presencia de Dios, pero Dios no lo dejó solo. Jonás enfrentó una gran tormenta en el mar y fue tragado por un gran pez. Dentro del pez, Jonás se arrepintió y oró a Dios. Entonces, por orden de Dios, el pez vomitó a Jonás en tierra firme.

Después de esto, «la palabra del Señor vino a Jonás por segunda vez». Dios le dio otra oportunidad para obedecer el mismo mandato que antes había ignorado. ¡Qué Dios tan misericordioso servimos! Cuando Jonás se apartó de su llamado, Dios no lo abandonó para siempre. Dios lo restauró y le dio otra oportunidad para cumplir su propósito.

Dios es el mismo hoy. Si has fallado en seguir su palabra antes, él aún puede hablarte de nuevo.  Quizás alguna vez escuchaste su llamado, pero te alejaste, decepcionado o con miedo. Quizás el pecado, el fracaso o el desánimo silenciaron tu obediencia. Pero hoy, Dios te dice de nuevo: "Ve".

La segunda vez puede que no sea tan brillante como la primera, pero aún está llena de la misericordia y la gracia de Dios. Él es el Dios de los nuevos comienzos. Si te ha hablado de nuevo, no tardes; respóndele con obediencia y gratitud.

Oremos

Señor, gracias por ser el Dios de las segundas oportunidades. Incluso cuando he fallado, no me has abandonado. Ayúdame a escuchar tu voz de nuevo y a obedecer sin dudar. Restaura mis fuerzas, renueva mi llamado y permíteme andar fielmente en tu voluntad. En el nombre de Jesús, amén.

14 de octubre de 2025

Nada Oculto

 Buenos días :)

Título del devocional: Nada oculto

Pasaje bíblico clave: Lucas 8:17

El mayor engaño de Satanás es hacerte creer que tus pecados ocultos nunca serán revelados. ¡Pero esto no es cierto! La Palabra de Dios nos dice claramente que todo lo oculto algún día saldrá a la luz. Así como el amanecer expone lo que estaba oculto en la oscuridad de la noche, también toda acción, pensamiento e intención secreta un día se manifestará ante Dios.

Quizás hoy intentes mantener algo oculto, quizás diciéndote a ti mismo: «Nadie lo descubrirá jamás». ¡Pero Dios lo sabe todo! La Biblia dice: «¿No ha de Dios escudriñar esto? Porque él conoce los secretos del corazón» (Salmo 44:21). Nada puede ocultarse de su vista. Él conoce todas nuestras acciones, palabras e incluso nuestros motivos. Llegará un momento en que todo será revelado y juzgado (Romanos 2:16).

Ningún pecado puede permanecer oculto para siempre.  Dios ha prometido que todo lo oculto saldrá a la luz, y que cada persona rendirá cuentas de su vida ante Él. Puede que el mundo no conozca tus pecados, pero Dios sí, y un día, serán expuestos.

A menudo juzgamos a los demás por sus faltas, olvidando que nuestras propias acciones ocultas también serán juzgadas. La Biblia dice: «Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo» (2 Corintios 5:10). Quienes creen que pueden engañar a Dios solo se engañan a sí mismos. Lo que hoy está oculto, un día será proclamado abiertamente.

Por lo tanto, vivamos honestamente ante Dios, confesando nuestros pecados en lugar de encubrirlos. Es mucho mejor arrepentirse ahora que ser expuestos más tarde. Una vida sincera y transparente ante Dios trae paz, libertad y gozo, porque no hay nada oculto que no sea revelado.

Oremos

Padre Celestial, gracias por recordarme que nada está oculto para Ti. Examina mi corazón y revela todo lo que te desagrada.  Límpiame de los pecados ocultos y ayúdame a vivir en verdad e integridad ante ti. Que mi vida te traiga gloria tanto en lo oculto como en lo visible. En el nombre de Jesús, amén.

7 de octubre de 2025

La oración te transforma

 Buenos días :)


Título del devocional: La oración te transforma


Pasaje bíblico clave: Éxodo 32:10


El propósito de la oración no es cambiar la voluntad de Dios, sino cambiarte a ti. No oramos para persuadir a Dios a cambiar sus planes; más bien, a través de la oración, nosotros mismos somos transformados. La oración nos lleva a la presencia de Dios, nos alinea con su propósito y nos prepara para aceptar su voluntad con gozo.

Moisés experimentó esto cuando Dios le dijo que destruiría a Israel por su pecado (Éxodo 32:10). Moisés no intentó cambiar el plan eterno de Dios; en cambio, se presentó ante Él con humildad e intercedió por el pueblo. Esa experiencia transformó al propio Moisés; comenzó a reflejar la compasión y la misericordia de Dios hacia la nación.

Cuando pasas tiempo con Dios en oración, Él no solo te escucha, sino que también obra en ti. Él moldea tu corazón para que tus deseos comiencen a reflejar los suyos. Dios usa la oración como herramienta para hacerte más como Él: misericordioso, paciente y lleno de amor.

Si oras por los demás, Dios ablandará tu corazón hacia ellos. Cuando intercedes por quienes te han hecho daño, Dios te llena de su perdón. Cuando oras por los perdidos, Dios te da su pasión por las almas. La oración no solo conmueve el corazón de Dios, sino que también transforma el corazón de quien ora.

Así que, pasa tiempo con Dios a diario. Al orar, notarás que cuanto más tiempo permanezcas en su presencia, más reflejarás su carácter. La oración te transforma, y cuando cambias, Dios puede usarte para transformar a otros.

Oremos

Padre Celestial,

Gracias por invitarme a tu presencia a través de la oración. Cambia mi corazón y hazme más como Tú. Enséñame a orar no para cambiar tu voluntad, sino para alinearme con ella. Lléname de tu compasión, paciencia y amor por los demás. Que mis oraciones traigan transformación, en mí y, a través de mí, en la vida de los demás. En el nombre de Jesús, amén.