«Sus salidas son desde el principio, desde los días de la eternidad.» (Miqueas 5:1)



 
L SEÑOR Jesús obró a favor de Su pueblo como su Representante delante del trono, mucho antes de que ellos aparecieran en el escenario del tiempo.

Fue «desde los días de la eternidad», que Jesús firmó el pacto con Su Padre que lo comprometía a pagar sangre por sangre, sufrimiento por sufrimiento, agonía por agonía y muerte por muerte a favor de Su pueblo.

Fue «desde los días de la eternidad», que Él se dio a Sí mismo sin murmurar una sola palabra, para que desde la corona de Su cabeza hasta la planta de Su pie sudase grandes gotas de sangre, para que fuese escupido, herido, burlado y quebrantado bajo los dolores de la muerte. Sus salidas como nuestro Fiador fueron «desde los días de la eternidad».

Oh alma mía, haz una pausa y maravíllate ante el propósito de Dios en la persona de Jesús, un propósito establecido «desde los días de la eternidad». Cristo te amó no sólo cuando naciste en el mundo, sino que Su delicia fue con los hijos de los hombres antes de que estos existiesen. Con frecuencia Él pensó en ellos; «desde los días de la eternidad»; puso en ellos Su afecto.

¡Qué!, alma mía, Él ha invertido tanto tiempo en tu salvación, ¿y ahora no la cumplirá? Ha salido Él «desde los días de la eternidad» para salvarte, ¿y ahora te dejará perder? ¡Qué!, te ha llevado en Sus manos como preciosa joya, ¿y ahora te dejará escurrir entre Sus dedos?

Oh alma mía, Él te escogió desde antes de que los montes vinieran a la luz, o los canales de los océanos fueran cavados, ¿y te rechazará ahora? ¡Imposible! Estoy seguro de que no me hubiera amado durante tanto tiempo si Él no fuera un Amante inmutable.

Sí, oh alma mía, si Él pudiese cansarse de ti, ya lo habría hecho hace mucho tiempo. Si no te hubiese amado con un amor tan profundo como el infierno y tan fuerte como la muerte, hace mucho que se habría apartado de ti.

¡Oh, alegría por encima de todas las alegrías, el saber que yo soy Su eterna e inalienable herencia, dada a Él por Su Padre antes que la tierra fue formada!

Esta noche el amor eterno será la almohada de mi cabeza.

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